jueves, 21 de septiembre de 2017

Las extraescolares ¿Quién? ¿Cuando? ¿Dónde? Y ¿Qué?


¿Quién?

Hablo de las extraescolares para niños de 4 a 8 años, aproximadamente. En las que creo que viene bien hacer algo diferente a lo que se hace en el cole en el horario lectivo, como complemento a su educación. No cuenta como extraescolar apuntar al niño a clases particulares de lengua o mates, eso no sería una extraescolar, sino refuerzo.

Digo desde los 4 años, porque en principio no contemplo antes las extraescolares, yo creo que un niño de 3 años no necesita extraescolares ( y quizás tampoco uno de 4), ya que salen del cole derrotados y ponerles encima extraescolares me parece brutal para ellos. En el caso de que se queden a comer en el cole lo ideal es que hagan un poco de siesta o al menos lo intenten. Y hablo con conocimiento de causa, porque mi hija no ha ido a extraescolares pero si a terapias desde las 4:30 de la tarde con 2, 3, 4 y 5 años y creedme que en más de una ocasión tuve que retirar terapias y la niña iba agotada, pero en este caso era algo necesario y no podía meterse en otro horario. Y eso que era todo muy lúdico.


miércoles, 20 de septiembre de 2017

¿Qué pasará con mi blog el día de mañana?


¿Qué pasará con mi blog el día de mañana? No sé si alguien se habrá planteado esto alguna vez, pero a mi la duda me invade y me corroe. No sé si este post lo leerá alguien, porque tengo este espacio muy abandonado y aunque siempre he procurado trabajarme los posts, cada vez me cuesta más escribir porque no sé dónde va acabar esto, no por si alguien lo lee, si no por cuál va a ser el futuro de este blog que es de lo que vengo a hablar hoy.


Este blog comenzó por tres motivos:

  1. Concienciación. Dar a conocer un tipo de maternidad diferente al que se suele ver en redes sociales y medios de comunicación,  que es la que se vive cuando se tiene un niño neurotípico, pero siempre desde un punto de vista optimista, aunque tengo que reconocer que cada vez es más visible.   
  2. Información/apoyo. Cuando descubrimos que algo no iba según lo esperado con nuestra hija mayor nos vimos súper perdidos y me pareció que contar nuestra experiencia podría ayudar a mucha gente. De hecho el post más leído es precisamente Mi hijo no habla, ¿debería preocuparme?
  3. Desahogo. Contar lo que estábamos viviendo me hacía ver las cosas con otra perspectiva mucho más positiva